Interesantemente denso y cansado
Los asesinos de la luna (Killers of the Flower Moon) es la más reciente aportación de Scorsese al cine, con una sorprendente duración de 3 horas y 26 minutos. Todo un reto para el más reacio a hacer descansos. Teniendo en cuenta que su anterior película, El Irlandés, cuenta con 3 horas y 29 minutos, parece que esta es la línea que ha decidido continuar desde entonces, eludiendo las críticas recibidas por la duración de su nuevo largometraje.
La película trata de cómo la tribu de los Osage, en América del Norte, es perseguida y engañada por el hombre blanco en los años 20 debido a que el territorio de esta tribu resulta estar sobre grandes cantidades de petróleo. Los 3 personajes principales de esta película se reparten entre 2 habituales del cine de Scorsese; De Niro y Di Caprio, además de Lily Gladstone, que despunta sobre el resto en su interpretación.
Scorsese ha trabajado conjuntamente con los Osage de tiempos actuales para obtener la mayor veracidad posible en el film. Todos los símbolos y ceremonias Osage son reales y han sido aprobadas para ser dispuestas en la película por los propios supervivientes de la tribu, detalle que es apreciable en la película teniendo esta información y que, personalmente, me ha resuelto algunas dudas sobre ciertos elementos y su forma de mostrarse que no acababa de comprender bien para con el ritmo de la película.
La trama está bien escalonada, pero es cierto que sentí que algunas subtramas debieron de haberse resuelto más pronto, y al contrario; algunas son tan fugaces que a mitad de película las olvidas. Si se mira desde la perspectiva de denuncia que presenta todo el rato, podría ser un recurso para prolongar el maltrato y la maldad mostrada con el fin de precisamente eso: prolongar un sufrimiento que no necesita ser prolongado.
Una película que sabe ser emotiva sin perder la seriedad del conflicto tan grande de intereses que propone pero que, tal como anuncian las críticas, es demasiado larga y le sobran, como mínimo, 40-50 minutos de metraje. La experiencia de verla en el cine en su día de estreno fue horriblemente incómoda, porque el contenido estaba muy bien pero mis piernas no tanto. No merece el Oscar.
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